Daniel Riobóo Buezo Seguir a @danirioboo
La primavera ha llegado a España y prácticamente ni nos hemos enterado por la epidemia del coronavirus y su consecuente y necesaria cuarentena. El tiempo es lluvioso y algo desapacible. Y el ambiente hosco, deprimente y nada festivo. El confinamiento afecta a todo y a todos. Los que pueden teletrabajar se estarán dando cuenta de que el teletrabajo no era la panacea y la mayoría probablemente esté trabajando bastante más de lo habitual. Al menos en mi caso llevo una semana sin parar con jornadas de once o doce horas de trabajo y además las redes se saturan con tanta población conectada. Y los que no pueden trabajar y tienen que permanecer en casa deben estar hastíados al no poder salir a la calle. Pero ojalá estos fueran nuestros mayores problemas. Pero no, cada vez hay más infectados y mucha gente grave y muriendo en los hospitales colapsados. Así que hoy la llegada de la primavera es realmente lo de menos. Al igual que tantas cosas, aplazaremos la celebración de su llegada para mejor ocasión. Y recemos para que sea cuanto antes.
[El cuadro de la foto es «Alegoría de la primavera» (1478) de Sandro Botticelli, una de las obras maestras del renacimiento italiano. Está en la Galería Uffizi, en Florencia. Cuando todo esto pase espero poder ir allí para verlo in situ]